Un tabique desviado se produce cuando el tabique se desplaza gravemente de la línea media. El síntoma más común de un tabique muy desviado o torcido es la dificultad para respirar por la nariz. Los síntomas suelen empeorar en un lado y, a veces, en realidad ocurren en el lado opuesto a la curva. En algunos casos, el tabique torcido puede interferir con el drenaje de los senos nasales, lo que resulta en infecciones repetidas de los senos nasales.