Un dedo en martillo es un dedo más pequeño doblado, a veces hinchado y doloroso. Hay dos tipos diferentes.
Dedos en martillo flexibles
Estos dedos en martillo son menos graves porque pueden diagnosticarse y tratarse mientras aún se encuentran en la etapa de desarrollo. Se llaman dedos en martillo flexibles porque todavía se pueden mover en la articulación.
Dedos rígidos en martillo
Esta variedad está más desarrollada y es más grave que la condición flexible. Los dedos en martillo rígidos se pueden ver en pacientes con artritis severa, por ejemplo, o en pacientes que esperan demasiado para buscar tratamiento profesional. Los tendones de un dedo en martillo rígido se han tensado y la articulación está desalineada e inmóvil.
Diagnóstico
Un podólogo puede diagnosticar un dedo en martillo mediante un examen físico y una radiografía. Ambos le dirán al médico qué tan avanzado está el problema y lo ayudarán a determinar qué tratamientos probar primero.
Tratamiento del dedo del pie en martillo
Las opciones de tratamiento varían según el tipo y la gravedad de cada dedo en martillo, aunque es importante identificar la deformidad al principio de su desarrollo para evitar la cirugía. Su médico examinará y radiografiará el área afectada y recomendará un plan de tratamiento específico para su condición.
- Acolchado y vendaje: el acolchado y el vendaje suelen ser los primeros pasos en el tratamiento de los dedos en martillo. El acolchado del dedo en martillo minimiza el dolor y permite que el paciente continúe con una vida normal y activa. El vendaje puede cambiar el desequilibrio alrededor de los dedos de los pies y así aliviar el estrés y el dolor.
- Medicamentos: se pueden recetar medicamentos antiinflamatorios e inyecciones de cortisona para aliviar el dolor agudo y la inflamación causada por el dedo en martillo.
- Inserciones de calzado: las inserciones de calzado personalizadas, llamadas ortesis, hechas por su podólogo, pueden ser útiles para controlar la función del pie. Un dispositivo ortopédico puede reducir los síntomas y prevenir el empeoramiento del dedo en martillo.
- Cirugía: el médico podiatra dispone de varios procedimientos quirúrgicos. Para deformidades menos graves, la cirugía eliminará la prominencia ósea y restablecerá la alineación normal de la articulación del dedo del pie, aliviando así el dolor. Dedos en martillo severos, pueden requerir una cirugía más compleja. La recuperación lleva tiempo y es común que haya algo de hinchazón y malestar durante varias semanas después de la cirugía.