Step 1
Precaliente el horno a 425 °F y cubra una fuente para hornear de 8x8 pulgadas con papel pergamino.
Step 2
En una cacerola mediana, hierva el caldo. Agregue la polenta y continúe revolviendo durante 2-3 minutos hasta que la polenta esté suave y espesa.
Step 3
Agregue ¼ de taza de queso y revuelva hasta que se derrita. Apaga el fuego, tapa la olla y deja reposar la polenta durante 5 minutos.
Step 4
Extienda la polenta en una capa uniforme en la fuente para hornear. Congela por 15 minutos o hasta que cuaje.
Step 5
Levante la polenta de la fuente para hornear y córtela en "papas fritas" de ¼ x 4 pulgadas. Coloque las papas fritas en una bandeja para hornear y mezcle suavemente con aceite, sal y el ¼ de taza de queso parmesano restante.
Step 6
Extienda las papas fritas uniformemente y hornee por 15 minutos o hasta que estén crujientes. Cuanto más tiempo los hornees, más crujientes quedarán.
Step 7
Disfrútalo tal cual o con tu salsa favorita.