El corazón tiene cuatro cámaras y cuatro válvulas. Las válvulas se abren y cierran con cada latido del corazón para impulsar la sangre. Una válvula puede no funcionar correctamente, ya sea porque comienza a filtrar sangre hacia atrás o porque la válvula comienza a estrecharse, impidiendo el flujo de sangre hacia adelante a través del corazón. Estos problemas pueden ser causados por una infección, la edad, ataques cardíacos o anomalías congénitas, incluso en una persona mayor. Los pacientes con enfermedad leve de las válvulas cardíacas pueden tener síntomas leves que pasan desapercibidos, mientras que aquellos con una enfermedad más grave pueden experimentar síntomas que incluyen dolor en el pecho, fatiga, hinchazón de las piernas y dificultad para respirar, entre otros. Es posible que se requiera cirugía para reparar o reemplazar la válvula que funciona mal.