Síntomas
La hiperhidrosis es un trastorno de las glándulas del sistema nervioso simpático que controlan los movimientos y procesos involuntarios del cuerpo.
El síntoma principal es la humedad producida por las glándulas sudoríparas. La sudoración ayuda al cuerpo a mantenerse fresco, pero la humedad excesiva puede interferir con la vida diaria y causar vergüenza, malestar o la necesidad de limpiarse o cambiarse de ropa con más frecuencia que aquellos sin hiperhidrosis.
Causas
Se desconoce la causa de la hiperhidrosis.
Cuando es causada por otra condición, como ansiedad o menopausia, se llama hiperhidrosis secundaria. Una vez que se trata la causa subyacente, la hiperhidrosis suele terminar. Cuando no es causada por otra afección, se denomina hiperhidrosis primaria y parece ser hereditaria.
Diagnóstico
La hiperhidrosis a menudo se diagnostica mediante una simple conversación con un médico, quien le preguntará al paciente cuándo, cuánto y dónde suda normalmente, y si ha notado algún desencadenante específico. Si un paciente transpira más de lo necesario para ayudar a su cuerpo a mantenerse fresco y hasta tal punto que la sudoración interfiere con su calidad de vida, es posible que tenga hiperhidrosis.
Tratamiento
Hay varias formas de tratar la hiperhidrosis, según el tipo y la gravedad de la situación del individuo. Primero se utilizan métodos no quirúrgicos. Los tratamientos incluyen:
Antitranspirantes
Los antitranspirantes tapan los conductos sudoríparos. Pueden causar irritación de la piel o la ropa si no se usan con cuidado. Los desodorantes, aunque útiles para controlar el olor corporal, se diferencian de los antitranspirantes porque no reducen la sudoración.
Medicamento
Se pueden utilizar sedantes si el paciente tiene hiperhidrosis inducida por estrés. Los fármacos anticolinérgicos, que ayudan a prevenir la estimulación de las glándulas sudoríparas, son comunes para otros tipos de hiperhidrosis.
bótox
Las inyecciones de toxina botulínica o botox pueden aliviar los síntomas en algunos pacientes con trastornos de la motilidad.
Cirugía
La cirugía tradicional y la cirugía mínimamente invasiva son opciones para pacientes en quienes otros tratamientos no han tenido éxito.
La simpatectomía torácica endoscópica es una opción mínimamente invasiva para las palmas sudorosas. Mientras está bajo anestesia general, el cirujano hace dos o tres pequeñas incisiones debajo del brazo e inserta pequeños instrumentos, incluida una cámara llamada toracoscopio, que se utiliza como guía. El cirujano localiza el nervio responsable de la glándula sudorípara hiperactiva y lo extirpa o interrumpe.
Para la hiperhidrosis grave de la axila, el paciente puede someterse a una cirugía para extirpar los nervios asociados.